Municipal ganó a Cooferro y volvió a Iquique a preparar su viaje a San Antonio

Fabián Cejas
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Cuando Municipal Iquique volvía a la ciudad ayer en la noche, en el bus se vivía un ambiente relajado, los jugadores veían una película y comentaban el partido que les dio el primer lugar del grupo norte luego de ganarle a Cooferro en el complicado Estadio de Mejillones.

Los jugadores vivieron uno de los partidos más complicados en su contexto, sin la participación habitual de las barras celestes. La cancha de tierra, el calor seco, la barra antagonista y el desempeño más que cuestionable del árbitro de partido, Alfonso Espejo. Aún así, Municipal aseguró el partido con el gol de Leonel Contreras a los 18 minutos. Las complicaciones se hicieron más graves un rato después, cuando el árbitro expulsó a Patrick Rojas y luego, en un claro acto de compensación, mandó a las duchas a Rolando Ossandon, uno de los jugadores más habilidosos de Cooferro.

En el segundo tiempo fue expulsado Leonel Contreras, por lo que el equipo hizo una severa rotación de jugadores para aguantar el marcador y generar ocasiones de gol. Sin Rojas en la línea defensiva, Dixon Ahumada tomó su puesto por la izquierda y Osses pasó al lugar de Dixon en la derecha. Después de la expulsión de Contreras, Jaime Carreño reemplazó a Michael Soto por el debutante Montoya, quien pasó a la defensa, cumpliendo una sólida labor. Patricio Contreras y Rodrigo Cerna entraron por César Venegas y Cristóbal Soto respectivamente. Así, Municipal quedó con Montoya, Marchant y Ahumada en la defensa, Osses, Isla y Farías en la mitad, Cerna haciendo un gran desgaste físico de la mitad hacia delante y Contreras como único delantero neto.

El partido terminó cerca de las seis de la tarde, dejando a Municipal Iquique como líder absoluto del grupo 6 y como el equipo con mejor rendimiento a nivel nacional.

Cuando las luces de la ciudad ya aparecían, en el bus de Municipal Iquique se acababa la última película de la noche. En el sector de Bajo Molle, Carreño le hablaba a sus dirigidos sobre las responsabilidades que se vienen ahora. “Hay mucha gente que cree en ustedes”, decía el ex jugador de la celeste, “este mes será decisivo”. A las once y media de la noche nos bajábamos todos en el Estadio y cada uno volvía a sus hogares, los jugadores sabiendo que cumplieron el primer objetivo, pero también al tanto de que queda por venir lo más importante.