domingo, febrero 10, 2008

Municipal hizo tres, para traerse los primeros tres

Rodrigo Schiaffo
rschiaffo@futboliquique.cl

Cientos de hinchas viajaban rumbo Arica con la ilusión de que el cuadro de Municipal Iquique comenzara con el pie derecho el torneo 2008. Nuevamente se verían las caras dos viejos conocidos, ambos con diferentes nombres, pero con el mismo hambre. Durante la semana Sulantay le restó importancia a este clásico y sólo pensaba en traerse los tres puntos, sin embargo los jugadores, protagonistas indiscutibles, esperaban con ansias el inicio del partido.

“Salimos del paso” comentaba, con un toque de modestia, el “negro” Sulantay, luego de triunfo por tres tantos a uno frente a su némesis de San Marcos. El primer gol llegó cerca de los treinta minutos de la etapa inicial, David Córdova, tras pase de Taucare define al primer palo del arco custodiado por el experimentado Kroll Albiña. De ahí en más Iquique no aflojó y, al igual que contra el Melgar, apretaba por todo el terreno. Un cambio forzado tuvo que realizar Sulantay, ya que por lesión salió el central Miguel Ayala siendo reemplazado por Christian Camilo.

La segunda fracción empezó a toda máquina. Solamente iban treinta y seis segundos del complemento cuando Marcelo Corrales le daba la ventaja a los dragones en tierras ariqueñas con un golazo. El come piernas pasto del Carlos Dittborn le pasaba la cuenta a los iquiqueños y los calambres no se hicieron esperar. Otro cambio por lesión tuvo que realizar el técnico iquiqueño, Marcelo Muñoz dejaba la cancha e ingresaba Sebastián Marchant. El desgaste físico de la visita hizo acrecentar a un cuadro de San Marcos que tenía el balón, pero no hacía daño.

Corría el minuto cuarenta y, tras una buena jugada de Christopher “Chicoria” Pulgar por la izquierda, Jonathan Novoa pone el descuento para la visita. Los fantasmas de los empates a último minuto rondaban, llegó el oportunismo y el olfato goleador de Alejandro Vrsalovic, que cada vez que entra, moja. El tanto del “Vrsa” le daba la tranquilidad a todos los iquiqueños presentes en el mundialista estadio ariqueño y aumentaba el marcador a tres tantos.

Para destacar de este triunfo la capacidad del equipo de cerrar el partido y dar la estocada al momento justo, porque ya está dicho, el que pega primero, lo hace dos veces, sólo que esta vez el dragón pegó y, por tres.

*Foto: www.elmorrocotudo.cl

domingo, febrero 03, 2008

Iquique pasó la prueba ante Melgar

Fabian Cejas
fcejas@futboliquique.cl

Casi veinticinco minutos de partido y David Córdova roba una pelota que salía del campo peruano, avanza unos metros y pone un centro al área que pica justo para ser empalmado por la zurda de Puch. La bocha al fondo de la red y el estadio desborda alegría, a un costado de la cancha Aníbal Irarrázabal empuña la derecha y mira a su gente de Tierra de Campeones S.A. con gestos de celebración. De pie frente al gramado José Sulantay casi ni se inmuta, un gol como ha visto centenares, éste es sólo el primero de sus dragones celestes en pasto iquiqueño.

El partido mismo fue de trámite tranquilo para los celestes, que en la segunda mitad sentenciarían el encuentro con un golazo de Juan Riquelme a los 14 minutos y cerca del final Alejandro Vrsalovic marcó su primer gol con la camiseta del dragón cuando Melgar ya jugaba con diez.

De los arequipeños poco qué decir, quizás no la mejor vara para medir a Municipal, ya que de no ser por el penal atajado por Chamorro, no pusieron mucha emoción al partido. Mientras que Iquique se vio ordenado y cumplió en lo suyo, dejando clara la propuesta de Sulantay en el esquema, siempre apretando las salidas contrarias e intentando jugar rápido sin trasladar mucho, además de las variantes que dispone, agotando los ocho cambios permitidos.

En general todo el conjunto funcionó, pero para destacar la dupla Taucare-Marchant quitando en mitad de cancha y el nuevo patrón del fondo celeste, Miguel Ayala, que con autoridad mandó a la zaga en los dos tiempos, primero con Carrasco y Navea y luego con Ahumada y Camilo, quizás el más incómodo como stopper.

Bajo los tres palos la mayor actividad fue en el segundo tiempo, por lo que Chamorro figuró mucho más que Naranjo, en especial con el penal atajado y el aliento fiel de la Furia que lo tiene como estandarte.

El ataque iquiqueño está renovado con la experiencia de los refuerzos y el desequilibrio explosivo lo puede encontrar en los pies de Puch o la rapidez de Juan Riquelme, mientras que Corrales y el croata Vrsalovic dejaron en claro que la fuste goleadora la tienen.

Tres a cero fue el saldo de la noche celeste, pero lo que importa recién empieza el próximo fin de semana, la barra ya cantó anticipando el clásico con Arica, cuando arranque el campeonato y de verdad haya que ganar.